Sin la pretensión de evocarlas a todas, la muestra expuesta es coherente con el eje conceptual en torno al cual se configura su discurso pictórico, el problema humano. Por ejemplo las acuarelas Mascaradas I, II, III, IV y V, correspondientes en lo esencial a la 2da etapa de su obra, evidencian la influencia del indigenismo ecuatoriano, pero estos elementos conjugados en su obra alcanzan una personalidad propia, una visión particular de aquello que el artista desea y logra hacer notar, enfatiza en la elocuencia de lo facial como expresión de la esencia humana para poder enunciar una determinada situación socio cultural y visibilizar la idiosincrasia Latinoamericana.
Las etapas ultimas del artista constan en la muestra en obras tales como las acuarelas: Introspección I, Políticos, Contrastes y Desigualdades o en los óleos: Existenzes, Existenciales o Migrante. Con una figuración simplificada de rasgos neofigurativos expresionistas. Estas obras retoman el problema humano, devenido en clave de interpretación de todo el quehacer pictórico de Ángel Aguilar.
Desde la perspectiva semiótica encierran un conjunto de parámetros universales que además de deleitar estéticamente, por el hábil empleo del color, la luz, la sombra y la textura tiene un profundo contenido reflexivo, devenido en denuncia social que satiriza, critica los problemas que afectan al sujeto humano.
Dr. C. Carlos Alberto Suarez Arcos - Crítico Cubano -